Qué malas son las prisas, pero quién no ha sucumbido alguna vez a ellas. Afortunadamente, hoy en día existen opciones para ofrecer los mejores productos de alta calidad en un abrir y cerrar de ojos.
En la película ‘Tiempos modernos’, Charles Chaplin representa lo frenética que puede llegar a ser la vida –especialmente para un obrero en la época de la Gran Depresión, donde la industrialización y la producción en cadena eran los grandes protagonistas–. Y, aunque han pasado varias décadas desde su estreno –en 1936–, la sociedad sigue enfrentándose a un ritmo de vida que muchas veces resulta muy exigente y extenuante.
Hoy en día, aprovechar el tiempo no es una opción: prácticamente es una necesidad. Cada uno se enfrenta y lidia con ello como puede y, si dispones de una cafetería, panadería u horno es normal que te hayas preguntado en alguna ocasión cómo ofrecer productos de calidad en tiempo récord, clave para poder ajustarte a las necesidades de la clientela.
Las masas congeladas son una de las posibles soluciones. El motivo de ello es sencillo: gracias a las masas congeladas para hostelería es sencillo disponer de alimentos exquisitos que conservan sus características intactas en las cámaras frigoríficas. Para poder ofrecer estos productos al cliente, solo hay que descongelarlos –normalmente el tiempo oscila entre 20 y 30 minutos– y darles posteriormente un golpe de horno.
¿Qué tipo de productos puedes ofrecer? De todo tipo, y para todos los gustos. Por ejemplo, en el caso de los panes, el pan de huerta y el bocadillo de agua son ese tipo de productos diferenciadores que siempre viene bien tener a mano. En el caso del primero, el pan de huerta, se necesitará hornear a 180 grados durante solamente 14-16 minutos para que quede crujiente y sabroso. En el caso, por otro lado, del bocadillo de agua –ese tipo de pan que hace que un bocadillo se convierta en «excepcional»– solo habrá que dejarlo en el horno a 180 grados durante unos 10-12 minutos. Fácil y rápido.
Pero por si fuera poco, además existen los producto “express”, aquellos que sólo necesitan un toque de horno de unos 4-5 minutos en los que conseguirás un pan caliente, como recién hecho, al momento y así poder acompañar las comidas de tu restaurante o cafetería con un delicioso pan que esté a la altura en cuanto a calidad y sabor.
Pero no solo eso. Las ventajas del pan precocido o el pan precocido congelado no se reducen únicamente a este tipo de productos; las masas congeladas también son una realidad en el terreno de la bollería gracias a las masas para bollería. Por ejemplo, en el caso de un Croissant Intense con Masa Madre Hélène –una de las últimas apuestas de las cafeterías, panaderías u hornos que quieren triunfar con su catálogo– se ve de forma clara.
Este croissant se descongela en 30 minutos, y tan solo necesita un tiempo de horneado de unos 12-16 minutos con una temperatura de 180 grados. ¿El resultado? Un envolvente intenso sabor a mantequilla con unas tentadoras notas aromáticas de caramelo. Delicioso.
Los snacks salados también son productos que, gracias a las masas congeladas, puedes ofrecer en tu establecimiento. Ten en cuenta, eso sí, que el tiempo de descongelación será un poco más elevado, de alrededor de una hora, es decir, 60 minutos. Sin embargo, merece la pena la espera.
Para ofrecer, por ejemplo, una Empanada hojaldrada de Pizza necesitará unos 60 minutos de descongelación, pero solo unos 20-25 minutos a una temperatura de 180 grados para ser suculenta. Además, gracias a su tamaño y versatilidad, este tipo de productos son perfectos para comer de una sola vez, ya sea en almuerzos, a media tarde, e incluso para comer o cenar.
Las empanadillas, por otro lado, son un tipo de snack salado que siempre apetece. Y con razón. Están deliciosas hay multitud de sabores, y son muy sencillas de comer. En el caso de la Empanadilla de Hojaldre y Bacon –rellena con un 50% de bacon y un toque de cebolla; se hace la boca agua solo de pensarlo– se necesitará también una hora de descongelación, y 25-30 minutos de horneado a 180 grados. Otra opción disponible son los artesanitos surtidos, para lo que solo se requerirán 30 minutos de descongelación y un tiempo de horneado de 12-15 minutos a 180 grados.
Lo más positivo de ofrecer bollería de estas características es que tú decides cuánto y cuándo. Puedes hornear una primera remesa a primera hora, o en el almuerzo, y aguardar hasta que se acaben para ofrecer una siguiente. De esta forma, no malgastas productos y puedes ir horneando conforme necesites. Gracias a las masas congeladas, el dueño de tu tiempo eres tú. Y cómo le habría gustado a Chaplin poder decir lo mismo.
Fuente/Fotos: panamarbakery.com